Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Deuteronomio 7, 11-25

11 Guarda, pues, los mandamientos, preceptos y normas que yo te
mando hoy poner en práctica.

12 Y por haber escuchado estas normas, por haberlas guardado y
practicado, Yahveh tu Dios te mantendrá la alianza y el amor que
bajo
juramento prometió a tus padres.

13 Te amará, te bendecirá, te multiplicará, bendecirá el fruto de tu
seno y el fruto de tu suelo, tu trigo, tu mosto, tu aceite, las crías de tus
vacas
y las camadas de tus rebaños, en el suelo que a tus padres juró que te daría.

14 Serás bendito más que todos los pueblos. No habrá macho ni
hembra estéril en ti ni en tus rebaños.

15 Yahveh apartará de ti toda enfermedad; no dejará caer sobre ti
ninguna de esas malignas epidemias de Egipto que tú conoces, sino que se
las enviará a todos los que te odian.

16 Destruirás, pues, todos esos pueblos que Yahveh tu Dios te entrega,
sin que tu ojo tenga piedad de ellos; y no darás culto a sus dioses, porque
eso sería un lazo para ti.

17 Acaso digas en tu corazón: «Esas naciones son más numerosas que
yo; ¿cómo voy a poder desalojarlas?»

18 Pero no las temas: acuérdate bien de lo que Yahveh tu Dios hizo
con Faraón y con todo Egipto,

19 de las grandes pruebas que tus ojos vieron, las señales y prodigios,
la mano fuerte y el tenso brazo con que Yahveh tu Dios te sacó. Lo mismo
hará Yahveh tu Dios con todos los pueblos a los que temes.

20 Yahveh tu Dios enviará incluso avispas contra ellos para destruir a
los que hubieren quedado y se te hubieren ocultado a ti.

21 Así que no tiembles ante ellos, porque en medio de ti está Yahveh
tu Dios, Dios grande y temible.

22 Yahveh tu Dios irá arrojando a esas naciones de delante de ti poco
a poco; no podrás exterminarlas de golpe, no sea que las bestias salvajes se
multipliquen contra ti,

23 sino que Yahveh tu Dios te las entregará y les infligirá grandes
descalabros hasta que queden destruidas.

24 Entregará a sus reyes en tu mano y tú borrarás sus nombres de
debajo del cielo: nadie podrá resistir ante ti, hasta que los hayas destruido.

25 Quemaréis las esculturas de sus dioses, y no codiciarás el oro y la
plata que los recubren, ni lo tomarás para ti, no sea que por ello caigas en
un lazo, pues es una cosa abominable para Yahveh tu Dios;