Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Hebreos 4, 1-13

1 Temamos, pues; no sea que, permaneciendo aún en vigor la promesa
de = entrar en su descanso, = alguno de vosotros parezca llegar rezagado.


2 También nosotros hemos recibido una buena nueva, lo mismo que
ellos. Pero la palabra que oyeron no aprovechó nada a aquellos que
no
estaban unidos por la fe a los que escucharon.

3 De hecho, hemos entrado en el descanso los que hemos creído,
según está dicho: = Por eso juré en mi cólera: ¡No entrarán en mi descanso!

= Y eso que las obras de Dios estaban terminadas desde la creación
del
mundo,

4 pues en algún lugar dice acerca del día séptimo: Y = descansó Dios
el día séptimo de todas sus obras. =

5 Y también en el pasaje citado: = ¡No entrarán en mi descanso! =

6 Por tanto, quedando en claro que algunos han de entrar en él, y que
los primeros en recibir la buena nueva no entraron a causa
de su
desobediencia,

7 vuelve a señalar un día, = hoy, = diciendo por David al cabo de tanto
tiempo, como queda dicho: = Si oís hoy su voz, no endurezcáis vuestros
corazones...

8 Porque si Josué les hubiera proporcionado el descanso, no habría
hablado Dios más tarde, de otro día.

9 Por tanto es claro que queda un descanso sabático para el pueblo de

Dios.

10 Pues quien = entra en su descanso, = también él = descansa de sus

trabajos, = al igual que Dios de los suyos.

11 Esforcémonos, pues, por = entrar en ese descanso, = para que nadie
caiga imitando aquella desobediencia.

12 Ciertamente, es viva la Palabra de Dios y eficaz, y más cortante
que espada alguna de dos filos. Penetra hasta las fronteras entre el alma y el
espíritu, hasta las junturas y médulas; y escruta los
sentimientos y
pensamientos del corazón.

13 No hay para ella criatura invisible: todo está desnudo y patente a
los ojos de Aquel a quien hemos de dar cuenta.