Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Hechos 16, 26-32

26 De repente se produjo un terremoto tan fuerte que los mismos
cimientos de la cárcel se conmovieron. Al momento quedaron abiertas todas
las puertas y se soltaron las cadenas de todos.

27 Despertó el carcelero y al ver las puertas de la cárcel abiertas, sacó
la espada e iba a matarse, creyendo que los presos habían huido.

28 Pero Pablo le gritó: «No te hagas ningún mal, que estamos todos
aquí.»

29 El carcelero pidió luz, entró de un salto y tembloroso se arrojó a los
pies de Pablo y Silas,

30 los sacó fuera y les dijo: «Señores, ¿qué tengo que hacer para
salvarme?»

31 Le respondieron: «Ten fe en el Señor Jesús y te salvarás tú y
tu
casa.»

32 Y le anunciaron la Palabra del Señor a él y a todos los de su casa.