Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Isaías 28, 9-23

9 «¿A quién se instruirá en el conocimiento? ¿a quién se le hará
entender lo que oye? A los recién destetados, a los retirados de los pechos.

10 Porque dice: = Sau la sau, sau la sau, cau la cau, cau la cau, zeer
sam, zeer sam. =»

11 Sí, con palabras extrañas y con lengua extranjera hablará a este
pueblo

12 él, que les había dicho: «¡Ahora, descanso! Dejad reposar al
fatigado. ¡Ahora, calma!» Pero ellos no han querido escuchar.

13 Ahora Yahveh les dice: «= Sau la sau, sau la sau, cau la cau, cau la
cau, zeer sam, zeer sam =», de suerte que vayan y caigan hacia atrás y se
fracturen, caigan en la trampa y sean presos.

14 Por tanto oíd la palabra de Yahveh, hombres burlones, señores de
este pueblo de Jerusalén.


15 Porque habéis dicho: «Hemos celebrado alianza con la muerte, y
con el seol hemos hecho pacto, cuando pasare el azote desbordado, no nos
alcanzará, porque hemos puesto la mentira por refugio nuestro y en el
engaño nos hemos escondido.»

16 Por eso, así dice el Señor Yahveh: «He aquí que yo pongo por
fundamento en Sión una piedra elegida, angular, preciosa y fundamental:
quien tuviere fe en ella no vacilará.

17 Pondré la equidad como medida y la justicia como nivel.» Barrerá
el granizo el refugio de mentira y las aguas inundarán el escondite.

18 Será rota vuestra alianza con la muerte y vuestro pacto con el seol
no se mantendrá. Cuando pasare el azote desbordado, os aplastará.

19 Siempre que pase os alcanzará. Porque mañana tras mañana pasará,
de día y de noche, y habrá estremecimiento sólo con oírlo.

20 La cama será corta para poder estirarse y el cobertor será estrecho
para poder taparse.

21 Porque como en el monte Perasim surgirá Yahveh, como en el
valle de Gabaón se enfurecerá para hacer su acción, su extraña
acción, y
para trabajar su trabajo, su exótico trabajo.

22 Ahora no os burléis, no sea que se aprieten vuestras ligaduras.
Porque cosa concluida y decidida he oído de parte de Yahveh Sebaot,
tocante a toda la tierra.

23 Escuchad y oíd mi voz, atended y oíd mi palabra.