Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Isaías 50, 4-6

4 El Señor Yahveh me ha dado lengua de discípulo, para que haga
saber al cansado una palabra alentadora. Mañana tras mañana despierta mi
oído, para escuchar como los discípulos;

5 el Señor Yahveh me ha abierto el oído. Y yo no me resistí, ni me
hice atrás.

6 Ofrecí mis espaldas a los que me golpeaban, mis mejillas a los que
mesaban mi barba. Mi rostro no hurté a los insultos y salivazos.