Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Isaías 56, 2-4

2 Dichoso el mortal que tal haga, el hombre que persevere en ello,
guardándose de profanar el sábado, guardando su mano de hacer nada
malo.

3 Que el extranjero que se adhiera a Yahveh, no diga: «¡De cierto que
Yahveh me separará de su pueblo!» No diga el eunuco: «Soy un árbol
seco.»

4 Pues así dice Yahveh: Respecto a los eunucos que guardan mis
sábados y eligen aquello que me agrada y se mantienen firmes en mi
alianza,