Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Isaías 66, 2-20

2 si todo lo hizo mi mano, y es mío todo ello? - Oráculo de Yahveh -.
Y ¿en quién voy a fijarme? En el humilde y contrito que tiembla a
mi
palabra.

3 Se inmola un buey, se abate un hombre, se sacrifica una oveja, se
desnuca un perro, se ofrece en oblación sangre de cerdo, se hace un
memorial de incienso, se bendice a los ídolos. Ellos mismos eligieron sus
propios caminos y en sus monstruos abominables halló su alma
complacencia.

4 También yo elegiré el vejarlos y sus temores traeré sobre ellos, por
cuanto que llamé y nadie respondió, hablé y no escucharon, sino que
hicieron lo que me parece mal y lo que no me gusta eligieron.

5 Escuchad la palabra de Yahveh, los que tembláis a su palabra.
Dijeron vuestros hermanos que os aborrecen, que os rechazan por causa de


mi nombre: «Que Yahveh muestre su gloria y veamos vuestra alegría.»
Pero ellos quedarán avergonzados.

6 Voz estruendosa viene de la ciudad, voz del Templo: la voz de
Yahveh que paga el merecido a sus enemigos.

7 Antes de tener dolores dio a luz, antes de llegarle el parto dio a luz
varón.

8 ¿Quién oyó tal? ¿Quién vio cosa semejante? ¿Es dado a luz un país
en un solo día? ¿O nace un pueblo todo de una vez? Pues bien: Tuvo
dolores y dio a luz Sión a sus hijos.

9 ¿Abriré yo el seno sin hacer dar a luz - dice Yahveh - o lo cerraré
yo, que hago dar a luz? - Dice tu Dios.

10 Alegraos, Jerusalén, y regocijaos por ella todos los que la amáis,
llenaos de alegría por ella todos los que por ella hacíais duelo;

11 de modo que maméis y os hartéis del seno de sus consuelos, de
modo que chupéis y os deleitéis de los pechos de su gloria.

12 Porque así dice Yahveh: Mirad que yo tiendo hacia ella, como río
la paz, y como raudal desbordante la gloria de las
naciones, seréis
alimentados, en brazos seréis llevados y sobre las rodillas
seréis
acariciados.

13 Como uno a quien su madre le consuela, así yo os consolaré (y por
Jerusalén seréis consolados).

14 Al verlo se os regocijará el corazón, vuestros huesos como el
césped florecerán, la mano de Yahveh se dará a conocer a sus siervos, y su
enojo a sus enemigos.

15 Pues he aquí que Yahveh en fuego viene y como torbellino son sus
carros, para desfogar su cólera con ira y su amenaza con llamas de fuego.

16 Porque con fuego Yahveh va a juzgar y con su espada a toda
carne, y serán muchas las víctimas de Yahveh.

17 Los que se consagran y los que se purifican en los jardines, detrás
de uno que está en medio, que comen carne de cerdo, cosas inmundas y de
rata, a una serán eliminados con sus acciones y sus pensamientos, - oráculo
de Yahveh -.

18 Yo vengo a reunir a todas las naciones y lenguas; vendrán y verán
mi gloria.

19 Pondré en ellos señal y enviaré de ellos algunos escapados a las
naciones: a Tarsis, Put y Lud, Mések, Ros, Túbal, Yaván; a las islas
remotas que no oyeron mi fama ni vieron mi gloria. Ellos anunciarán
mi
gloria a las naciones.

20 Y traerán a todos vuestros hermanos de todas las naciones como
oblación a Yahveh - en caballos, carros, literas, mulos y dromedarios - a mi
monte santo de Jerusalén - dice Yahveh - como traen los hijos de Israel la
oblación en recipiente limpio a la Casa de Yahveh.