Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Levítico 22, 8-11

8 No comerá animal muerto o destrozado que le haga impuro. Yo,
Yahveh.

9 Que guarden mis observancias, no sea que, cargados así de pecado,
al profanarlas mueran por ello. Yo, Yahveh, el que los santifico.

10 Ningún laico comerá de las cosas sagradas; ningún huésped del
sacerdote ni jornalero suyo comerá de las cosas sagradas.

11 Pero si un sacerdote con su dinero compra una persona, ésta podrá
comer de las cosas sagradas; y también el siervo nacido en la casa: ambos
pueden comer del pan del sacerdote.