Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Lucas 13, 17-28

17 Y cuando decía estas cosas, sus adversarios quedaban confundidos,
mientras que toda la gente se alegraba con las maravillas que hacía.

18 Decía, pues: «¿A qué es semejante el Reino de Dios? ¿A qué lo
compararé?

19 Es semejante a un grano de mostaza, que tomó un hombre y lo
puso en su jardín, y creció hasta hacerse árbol, y las aves del cielo anidaron
en sus ramas.»

20 Dijo también: «¿A qué compararé el Reino de Dios?

21 Es semejante a la levadura que tomó una mujer y la metió en tres
medidas de harina, hasta que fermentó todo.»

22 Atravesaba ciudades y pueblos enseñando, mientras caminaba
hacia Jerusalén.

23 Uno le dijo: «Señor, ¿son pocos los que se salvan?» El les dijo:

24 «Luchad por entrar por la puerta estrecha, porque, os digo, muchos
pretenderán entrar y no podrán.

25 «Cuando el dueño de la casa se levante y cierre la puerta, os
pondréis los que estéis fuera a llamar a la puerta, diciendo:
“¡Señor,
ábrenos!” Y os responderá: “No sé de dónde sois.”

26 Entonces empezaréis a decir: “Hemos comido y bebido contigo, y
has enseñado en nuestras plazas”;

27 y os volverá a decir: “No sé de dónde sois. = ¡Retiraos de mí, todos
los agentes de injusticia!” =

28 «Allí será el llanto y el rechinar de dientes, cuando veáis a
Abraham, Isaac y Jacob y a todos los profetas en el Reino de Dios, mientras
a vosotros os echan fuera.