Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Mateo 20, 28-33

28 de la misma manera que el Hijo del hombre no ha venido a ser

servido, sino a servir y a dar su vida como rescate por muchos.»
29 Cuando salían de Jericó, le siguió una gran muchedumbre.

30 En esto, dos ciegos que estaban sentados junto al camino, al
enterarse que Jesús pasaba, se pusieron a gritar: «¡Señor, ten compasión de
nosotros, Hijo de David!»

31 La gente les increpó para que se callaran, pero ellos gritaron más
fuerte: «¡Señor, ten compasión de nosotros, Hijo de David!»

32 Entonces Jesús se detuvo, los llamó y dijo: «¿Qué queréis que os
haga?»


33 Dícenle: «¡Señor, que se abran nuestros ojos!»