Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Nehemías 8, 5-11

5 Esdras abrió el libro a los ojos de todo el pueblo - pues estaba más
alto que todo el pueblo - y al abrirlo, el pueblo entero se puso en pie.

6 Esdras bendijo a Yahveh, el Dios grande; y todo el pueblo, alzando
las manos, respondió: «¡Amén! ¡Amén!»; e inclinándose se postraron ante
Yahveh, rostro en tierra.

7 (Josué, Baní, Serebías, Yamín, Aqcub, Sabtay, Hodiyías, Maaseías,
Quelitá, Azarías, Yozabad, Janán, Pelaías, que eran levitas, explicaban
la
Ley al pueblo que seguía en pie.)

8 Y Esdras leyó en el libro de la Ley de Dios,
aclarando e
interpretando el sentido, para que comprendieran la lectura.

9 Entonces (Nehemías - el Gobernador - y) Esdras, el sacerdote
escriba (y los levitas que explicaban al pueblo) dijeron a todo el
pueblo:

«Este día está consagrado a Yahveh vuestro Dios; no estéis tristes ni
lloréis»; pues todo el pueblo lloraba al oír las palabras de la Ley.

10 Díjoles también: «Id y comed manjares grasos, bebed bebidas
dulces y mandad su ración a quien no tiene nada preparado. Porque este día
está consagrado a nuestro Señor. No estéis tristes: la alegría de Yahveh es
vuestra fortaleza.»

11 También los levitas tranquilizaban al pueblo diciéndole: «Callad:
este día es santo. No estéis tristes.»