Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Romanos 6, 1-14

1 ¿Qué diremos, pues? ¿Que debemos permanecer en el pecado para
que la gracia se multiplique? ¡De ningún modo!

2 Los que hemos muerto al pecado ¿cómo seguir viviendo en él?

3 ¿O es que ignoráis que cuantos fuimos bautizados en Cristo Jesús,
fuimos bautizados en su muerte?

4 Fuimos, pues, con él sepultados por el bautismo en la muerte, a fin
de que, al igual que Cristo fue resucitado de entre los muertos por medio de
la gloria del Padre, así también nosotros vivamos una vida nueva.

5 Porque si hemos hecho una misma cosa con él por una muerte
semejante a la suya, también lo seremos por una resurrección semejante;

6 sabiendo que nuestro hombre viejo fue crucificado con él, a fin de
que fuera destruido este cuerpo de pecado y cesáramos de ser esclavos del
pecado.

7 Pues el que está muerto, queda librado del pecado.

8 Y si hemos muerto con Cristo, creemos que también viviremos con

él,

9 sabiendo que Cristo, una vez resucitado de entre los muertos, ya no

muere más, y que la muerte no tiene ya señorío sobre él.

10 Su muerte fue un morir al pecado, de una vez para siempre; mas su
vida, es un vivir para Dios.

11 Así también vosotros, consideraos como muertos al pecado y vivos
para Dios en Cristo Jesús.

12 No reine, pues, el pecado en vuestro cuerpo mortal de modo que
obedezcáis a sus apetencias.

13 Ni hagáis ya de vuestros miembros armas de injusticia al servicio
del pecado; sino más bien ofreceos vosotros mismos a Dios como muertos
retornados a la vida; y vuestros miembros, como armas de justicia al
servicio de Dios.

14 Pues el pecado no dominará ya sobre vosotros, ya que no estáis
bajo la ley sino bajo la gracia.