Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Salmo 119, 92-96

92 Si tu ley no hubiera sido mi delicia, ya habría perecido en mi

miseria.

93 Jamás olvidaré tus ordenanzas, por ellas tú me das la vida.
94 Tuyo soy, sálvame, pues tus ordenanzas voy buscando.

95 Para perderme me acechan los impíos, yo estoy atento a tus
dictámenes.

96 De todo lo perfecto he visto el límite: ¡Qué inmenso es tu
mandamiento!