34Y les dice: "Mi alma está triste hasta el punto de morir 35Y adelantándose un poco, caía en tierra y suplicaba que a ser posible pasara de él aquella hora. 36Y decía: "¡Abbá, Padre! 37Viene entonces y los encuentra dormidos 38Velad y orad, para que no caigáis en tentación 39Y alejándose de nuevo, oró diciendo las mismas palabras. 40Volvió otra vez y los encontró dormidos, pues sus ojos estaban cargados 41Viene por tercera vez y les dice: "Ahora ya podéis dormir y descansar. Basta ya. Llegó la hora. Mirad que el Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los pecadores. 42¡Levantaos! ¡vámonos! Mirad, el que me va a entregar está cerca." 43Todavía estaba hablando, cuando de pronto se presenta Judas, uno de los Doce, acompañado de un grupo con espadas y palos, de parte de los sumos sacerdotes, de los escribas y de los ancianos. 44El que le iba a entregar les había dado esta contraseña: "Aquel a quien yo dé un beso, ése es, prendedle y llevadle con cautela." 45Nada más llegar, se acerca a él y le dice: "Rabbí", y le dio un beso. 46Ellos le echaron mano y le prendieron. 47Uno de los presentes, sacando la espada, hirió al siervo del Sumo Sacerdote, y le llevó la oreja. 48Y tomando la palabra Jesús, les dijo: "¿Como contra un salteador habéis salido a prenderme con espadas y palos? 49Todos los días estaba junto a vosotros enseñando en el Templo, y no me detuvisteis. Pero es para que se cumplan las Escrituras." 50Y abandonándole huyeron todos. 51Un joven le seguía cubierto sólo de un lienzo 52Pero él, dejando el lienzo, se escapó desnudo. 53Llevaron a Jesús ante el Sumo Sacerdote, y se reúnen todos los sumos sacerdotes, los ancianos y los escribas. 54También Pedro le siguió de lejos, hasta dentro del palacio del Sumo Sacerdote, y estaba sentado con los criados, calentándose al fuego. 55Los sumos sacerdotes y el Sanedrín entero andaban buscando contra Jesús un testimonio para darle muerte 56Pues muchos daban falso testimonio contra él, pero los testimonios no coincidían. 57Algunos, levantándose, dieron contra él este falso testimonio: 58"Nosotros le oímos decir: Yo destruiré este Santuario hecho por hombres y en tres días edificaré otro no hecho por hombres." 59Y tampoco en este caso coincidía su testimonio. 60Entonces, se levantó el Sumo Sacerdote y poniéndose en medio, preguntó a Jesús: "¿No respondes nada? ¿Qué es lo que éstos atestiguan contra ti?" 61Pero él seguía callado y no respondía nada. El Sumo Sacerdote le preguntó de nuevo: "¿Eres tú el Cristo, el Hijo del Bendito?" 62Y dijo Jesús: "Sí, yo soy, y veréis al Hijo del hombre sentado a la diestra del Poder y venir entre las nubes del cielo." 63El Sumo Sacerdote se rasga las túnicas y dice: "¿Qué necesidad tenemos ya de testigos? 64Habéis oído la blasfemia. ¿Qué os parece?" Todos juzgaron que era reo de muerte. 65Algunos se pusieron a escupirle, le cubrían la cara y le daban bofetadas, mientras le decían: "Adivina", y los criados le recibieron a golpes. 66Estando Pedro abajo en el patio, llega una de las criadas del Sumo Sacerdote 67y, al ver a Pedro calentándose, le mira atentamente y le dice: "También tú estabas con Jesús de Nazaret." 68Pero él lo negó: "Ni sé ni entiendo qué dices", y salió afuera, al portal, y cantó un gallo. 69Le vio la criada y otra vez se puso a decir a los que estaban allí: "Este es uno de ellos." 70Pero él lo negaba de nuevo. Poco después, los que estaban allí volvieron a decir a Pedro: "Ciertamente eres de ellos pues además eres galileo." 71Pero él se puso a echar imprecaciones y a jurar: "¡Yo no conozco a ese hombre de quien habláis!"