Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Eclesiastés 12, 8-12

8 ¡Vanidad de vanidades! - dice Cohélet -: ¡todo vanidad!

9 Cohélet, a más de ser un sabio, enseñó doctrina al pueblo. Ponderó e
investigó, compuso muchos proverbios.

10 Cohélet trabajó mucho en inventar frases felices, y escribir bien
sentencias verídicas.

11 Las palabras de los sabios son como aguijadas, o como estacas
hincadas, puertas por un pastor para controlar el rebaño.

12 Lo que de ellas se saca, hijo mío, es ilustrarse. Componer muchos
libros es nunca acabar, y estudiar demasiado daña la salud.