Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Eclesiástico 29, 2-16

2 Perdona a tu prójimo el agravio, y, en cuanto lo pidas, te serán
perdonados tus pecados.

3 Hombre que a hombre guarda ira, ¿cómo del Señor espera
curación?

4 De un hombre como él piedad no tiene, ¡y pide perdón por sus
propios pecados!

5 El, que sólo es carne, guarda rencor, ¿quién obtendrá el perdón de
sus pecados?

6 Acuérdate de las postrimerías, y deja ya de odiar, recuerda la
corrupción y la muerte, y sé fiel a los mandamientos.

7 Recuerda los mandamientos, y no tengas rencor a tu prójimo,
recuerda la alianza del Altísimo, y pasa por alto la ofensa.

8 Absténte de disputas y evitarás el pecado, porque el apasionado
atiza las disputas.

9 El pecador enzarza a los amigos, entre los que están en paz siembra
discordia.

10 Según sea la leña, así arde el fuego, según su violencia, arde
la
disputa; según la fuerza del hombre es su furor y conforme a su
riqueza
sube su ira.

11 Riña súbita prende fuego, disputa precipitada vierte sangre.

12 Si soplas una chispa, prenderá, si la escupes, se apagará, y ambas
cosas salen de tu boca.

13 Al soplón de lengua doble, maldícele, que ha perdido a muchos
que vivían en paz.

14 A muchos sacudió la lengua triple, los dispersó de nación en
nación; arrasó ciudades fuertes y derruyó casas de magnates.

15 La lengua triple repudió a mujeres varoniles, las privó del fruto de
sus trabajos.

16 El que la atiende no encontrará reposo, ni plantará su tienda en

paz.