Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Eclesiástico 51, 18-26

18 Y los salmistas también le alababan con sus voces, el son vibrante
formaba una dulce melodía.

19 Y suplicaba el pueblo al Señor Altísimo, orando ante el
Misericordioso, hasta que terminaba la ceremonia del Señor y concluía su
liturgia.

20 Entonces bajaba y elevaba sus manos sobre toda la asamblea de
los hijos de Israel, para dar con sus labios la bendición del Señor y tener el
honor de pronunciar su nombre.

21 Y por segunda vez todos se postraban para recibir la bendición del
Altísimo.


22 Y ahora bendecid al Dios del universo, el que por todas partes
hace grandes cosas, el que exaltó nuestros días desde el seno materno, y que
nos trata según su misericordia.

23 Que nos dé contento de corazón, y que haya paz en nuestros días
en Israel por los siglos de los siglos.

24 Que su misericordia sea fiel con nosotros y en nuestros días nos
rescate.

25 Hay dos naciones que mi alma detesta, y la tercera ni siquiera es
nación:

26 los habitantes de la montaña de Seír, los filisteos y el pueblo necio
que mora en Siquem.