Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Ezequiel 16, 28-32

28 Y no harta todavía, te prostituiste a los asirios; te
prostituiste sin
hartarte tampoco.

29 Luego, multiplicaste tus prostituciones en el país de los
mercaderes, en Caldea, y tampoco esta vez quedaste harta.

30 ¡Oh, qué débil era tu corazón - oráculo del Señor Yahveh - para
cometer todas estas acciones, dignas de una prostituta descarada!

31 Cuando te construías un prostíbulo a la cabecera de todo camino,
cuando te hacías una altura en todas las plazas, despreciando el salario, no
eras como la prostituta.

32 La mujer adúltera, en lugar de su marido, toma ajenos.