Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Ezequiel 23, 3-37

3 Se prostituyeron en Egipto; se prostituyeron en su juventud. Allí
fueron palpados sus pechos y acariciado su seno virginal.

4 Estos eran sus nombres: Oholá, la mayor, y Oholibá, su hermana.
Fueron mías y dieron a luz hijos e hijas. Sus nombres: Oholá es Samaria;
Oholibá, Jerusalén.

5 Oholá se prostituyó cuando me pertenecía a mí; se enamoró
perdidamente de sus amantes, los asirios sus vecinos,

6 vestidos de púrpura, gobernadores y prefectos, todos ellos jóvenes
apuestos y hábiles caballeros.

7 Les otorgó sus favores - eran todos ellos la flor de los asirios - y, con
todos aquellos de los que se había enamorado, se contaminó al contacto de
todas sus basuras.


8 No cejó en sus prostituciones comenzadas en Egipto, donde se
habían acostado con ella en su juventud, acariciando su seno
virginal, y
desahogando con ella su lascivia.

9 Por eso yo la entregué en manos de sus amantes, en manos de los
asirios de los que se había enamorado.

10 Estos descubrieron su desnudez, se llevaron a sus hijos y sus hijas,
y a ella misma la mataron a espada. Vino así a ser ejemplo para las mujeres,
porque se había hecho justicia de ella.

11 Su hermana Oholibá vio esto, pero su pasión y sus prostituciones
fueron todavía más escandalosas que las de su hermana.

12 Se enamoró de los asirios, gobernadores y prefectos, vecinos
suyos, magníficamente vestidos, hábiles caballeros, y todos ellos
jóvenes
apuestos.

13 Yo vi que estaba impura; la conducta era la misma para las dos,

14 pero ésta superó sus prostituciones: vio hombres pintados en la
pared, figuras de caldeos pintadas con bermellón,

15 con cinto en las caderas y amplios turbantes en sus cabezas, con
aspecto de escuderos todos ellos, que representaban a los babilonios,
caldeos de origen,

16 y en cuanto los vio se enamoró de ellos y les envió mensajeros a
Caldea.

17 Los babilonios vinieron donde ella, a compartir el lecho de los
amores y a contaminarla con su lascivia; y cuando se contaminó con ellos,
su deseo se apartó de ellos.

18 Dejó así al descubierto sus prostituciones y su desnudez; y yo me
aparté de ella como me había apartado de su hermana.

19 Pero ésta multiplicó sus prostituciones, acordándose de los días de
su juventud, cuando se prostituía en el país de Egipto,

20 y se enamoraba de aquellos disolutos de carne de asnos
y
miembros de caballos.

21 Has renovado así la inmoralidad de tu juventud, cuando en Egipto
acariciaban tu busto palpando tus pechos juveniles.

22 Pues bien, Oholibá, así dice el Señor Yahveh: He aquí que yo
suscito contra ti a todos tus amantes, de los que te has apartado; los voy a
traer contra ti de todas partes,

23 a los babilonios y a todos los caldeos, los de Pecod, de Soa y de
Coa, y con ellos a todos los asirios, jóvenes apuestos,
gobernadores y
prefectos, todos ellos escuderos de título y hábiles caballeros;

24 y vendrán contra ti desde el norte carros y carretas, con una
asamblea de pueblos. Por todas partes te opondrán el pavés, el escudo y el
yelmo. Yo les daré el encargo de juzgarte y te juzgarán conforme a
su
derecho.

25 Desencadenaré mis celos contra ti, y te tratarán con furor, te
arrancarán la nariz y las orejas, y lo que quede de los tuyos caerá a espada;
se llevarán a tus hijos y a tus hijas, y lo que quede de los
tuyos será
devorado por el fuego.


26 Te despojarán de tus vestidos y se apoderarán de tus joyas.

27 Yo pondré fin a tu inmoralidad y a tus prostituciones comenzadas
en Egipto; no levantarás más tus ojos hacia ellos, ni volverás a acordarte de
Egipto.

28 Porque así dice el Señor Yahveh: He aquí que yo te entrego en
manos de los que detestas, en manos de aquellos de los que te has apartado.

29 Ellos te tratarán con odio, se apoderarán de todo el fruto de tu
trabajo y te dejarán completamente desnuda. Así quedará al descubierto la
vergüenza de tus prostituciones. Tu inmoralidad y tus prostituciones

30 te han acarreado todo esto, por haberte prostituido a las naciones,
por haberte contaminado con sus basuras.

31 Has imitado la conducta de tu hermana, y yo pondré su cáliz en tu
mano.

32 Así dice el Señor Yahveh: Beberás el cáliz de tu hermana, cáliz
ancho y profundo, que servirá de burla e irrisión, tan grande es su cabida.

33 Te empaparás de embriaguez y de aflicción. Cáliz de desolación y
de angustia, el cáliz de tu hermana Samaria.

34 Lo beberás, lo apurarás; roerás hasta los cascotes, y te desgarrarás
el seno. Porque he hablado yo, oráculo del Señor Yahveh.

35 Por eso, así dice el Señor Yahveh: Puesto que me has olvidado y
me has arrojado a tus espaldas, carga tú también con tu inmoralidad y tus
prostituciones.

36 Después, Yahveh me dijo: Hijo de hombre, ¿vas a juzgar a Oholá y
Oholibá? Repróchales sus abominaciones.

37 Han cometido adulterio, están ensangrentadas sus manos, han
cometido adulterio con sus basuras, y hasta a sus hijos, que me habían dado
a luz, los han hecho pasar por el fuego como alimento para ellas.