Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Hebreos 11, 22-40

22 Por la fe, José, moribundo, evocó el éxodo de los hijos de Israel, y
dio órdenes respecto de sus huesos.

23 Por la fe, Moisés, recién nacido, = fue durante tres meses ocultado
por sus padres, = pues = vieron = que el niño era = hermoso = y
no
temieron el edicto del rey.

24 Por la fe, = Moisés, ya adulto, = rehusó ser llamado hijo de una hija
de Faraón,

25 prefiriendo ser maltratado con el pueblo de Dios a disfrutar el
efímero goce del pecado,

26 estimando como riqueza mayor que los tesoros de Egipto = el
oprobio de Cristo, = porque tenía los ojos puestos en la recompensa.

27 Por la fe, salió de Egipto sin temer la ira del rey; se mantuvo firme
como si viera al invisible.

28 Por la fe, celebró la = Pascua = e hizo la aspersión de = sangre =
para que el = Exterminador = no tocase a los primogénitos de Israel.

29 Por la fe, atravesaron el mar Rojo como por una tierra seca;
mientras que los egipcios intentando lo mismo, fueron tragados.

30 Por la fe, se derrumbaron los muros de Jericó, después de ser
rodeados durante siete días.

31 Por la fe, la ramera Rajab no pereció con los incrédulos, por haber
acogido amistosamente a los exploradores.

32 Y ¿a qué continuar? Pues me faltaría el tiempo si hubiera de hablar
sobre Gedeón, Barac, Sansón, Jefté, David, Samuel y los profetas.

33 Estos, por la fe, sometieron reinos, hicieron justicia, alcanzaron las
promesas, cerraron la boca a los leones;

34 apagaron la violencia del fuego, escaparon del filo de la espada,
curaron de sus enfermedades, fueron valientes en la guerra, rechazando
ejércitos extranjeros;

35 las mujeres recobraban resucitados a sus muertos. Unos fueron
torturados, rehusando la liberación por conseguir una resurrección mejor;

36 otros soportaron burlas y azotes, y hasta cadenas y prisiones;


37 apedreados, torturados, aserrados, muertos a espada; anduvieron
errantes cubiertos de pieles de oveja y de cabras; faltos de todo; oprimidos y
maltratados,

38 ¡hombres de los que no era digno el mundo!, errantes por desiertos
y montañas, por cavernas y antros de la tierra.

39 Y todos ellos, aunque alabados por su fe, no consiguieron el objeto
de las promesas.

40 Dios tenía ya dispuesto algo mejor para nosotros, de modo que no
llegaran ellos sin nosotros a la perfección.