Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Hechos 2, 29-37

29 «Hermanos, permitidme que os diga con toda libertad cómo el
patriarca David murió y fue sepultado y su tumba permanece entre nosotros
hasta el presente.


30 Pero como él era profeta y sabía que Dios = le había asegurado =
con juramento = que se sentaría en su trono un descendiente de su sangre,

=

31 vio a lo lejos y habló de la resurrección de Cristo, que = ni
fue
abandonado en el Hades = ni su carne = experimentó la corrupción. =

32 A este Jesús Dios le resucitó; de lo cual todos nosotros somos
testigos.

33 Y exaltado por la diestra de Dios, ha recibido del Padre el Espíritu
Santo prometido y ha derramado lo que vosotros veis y oís.

34 Pues David no subió a los cielos y sin embargo dice: = Dijo el
Señor a mi Señor: Siéntate a mi diestra =

35 = hasta que ponga a tus enemigos por escabel de tus pies. =

36 «Sepa, pues, con certeza toda la casa de Israel que Dios ha
constituido Señor y Cristo a este Jesús a quien vosotros habéis crucificado.»
37 Al oír esto, dijeron con el corazón compungido a Pedro y a los

demás apóstoles: «¿Qué hemos de hacer, hermanos?»