Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Isaías 51, 21-23

21 Por eso, escucha esto, pobrecilla, ebria, pero no de vino.

22 Así dice tu Señor Yahveh, tu Dios, defensor de tu pueblo. Mira que
yo te quito de la mano la copa del vértigo, el cáliz de mi ira; ya no tendrás
que seguir bebiéndolo.

23 Yo lo pondré en la mano de los que te afligían, de los que a
ti
misma te decían: «Póstrate para que pasemos», y tú pusiste tu espalda como
suelo y como calle de los que pasaban.