Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Jeremías 42, 3-22

3 y que nos indique tu Dios Yahveh el camino por donde hemos de ir
y lo que hemos de hacer.»

4 Díceles el profeta Jeremías: «De acuerdo: ahora mismo me pongo a
rogar a vuestro Dios Yahveh como decís, y sea cual fuere la respuesta de
Yahveh para vosotros, yo os la declararé sin ocultaros palabra.»

5 Y ellos dijeron a Jeremías: «Séanos Yahveh testigo veraz y leal, si
no obramos conforme a cualquier mensaje que tu Dios Yahveh te envía
para nosotros.

6 Sea grata o sea ingrata, nosotros oiremos la voz de nuestro Dios
Yahveh a quien te enviamos, por cuanto que bien nos va cuando oímos la
voz de nuestro Dios Yahveh.»

7 Pues bien, al cabo de diez días fue dirigida la palabra de Yahveh a
Jeremías.

8 Este llamó a Yojanán, hijo de Caréaj, a todos los jefes de las fuerzas
que había con él y al pueblo todo, del chico al grande,

9 y les dijo: «Así dice Yahveh, el Dios de Israel, a quien me habéis
enviado en demanda de su favor:

10 Si os quedáis a vivir en esta tierra, yo os edificaré y no os destruiré,
os plantaré y no os arrancaré, porque me pesa del mal que os he hecho.

11 No temáis al rey de Babilonia, que tanto os asusta: no temáis nada
de él - oráculo de Yahveh - que con vosotros estoy yo para
salvaros y
libraros de su mano.

12 Haré que se os tenga compasión y él os la tendrá y os devolverá a
vuestro suelo.

13 Pero si decís vosotros: “No nos quedamos en este país”, desoyendo
así la voz de vuestro Dios Yahveh,

14 diciendo: “No, sino que al país de Egipto iremos, donde no veamos
guerra, ni oigamos toque de cuerno, ni tengamos hambre de pan, y allí nos
quedaremos”;

15 ¡pues bien! en ese caso, oíd la palabra de Yahveh, oh resto de Judá.
Así dice Yahveh Sebaot, el Dios de Israel: Si vosotros enderezáis rumbo a
Egipto, y entráis como refugiados allí,

16 entonces la espada que teméis os alcanzará allí en Egipto, y el
hambre que receláis, allá os irá pisando los talones; y allí, en Egipto mismo,
moriréis.

17 Así sucederá que todos los que enderecen rumbo a Egipto como
refugiados morirán por la espada, por el hambre y por la peste, y
no les
quedará superviviente ni evadido del daño que yo traiga sobre ellos.


18 Porque así dice Yahveh Sebaot, el Dios de Israel: Como se vertió
mi ira y mi cólera sobre los habitantes de Jerusalén, así se verterá mi cólera
contra vosotros como entréis en Egipto, y seréis tema de imprecación
y
asombro, de maldición y oprobio, y no veréis más este lugar.

19 Ha dicho Yahveh respecto a vosotros, resto de Judá: “No entréis en
Egipto.” Podéis estar seguros que os lo he avisado hoy,

20 que os estáis engañando a vosotros mismos, pues que vosotros me
habéis enviado a vuestro Dios Yahveh diciendo: “Ruega por nosotros a
nuestro Dios Yahveh, y cuanto diga nuestro Dios Yahveh nos lo declaras,
que lo haremos.”

21 Yo os lo he declarado hoy, pero no hacéis caso de vuestro Dios
Yahveh en nada de cuanto me ha enviado a deciros.

22 Ahora, pues, podéis estar seguros de que por la espada, el hambre y
la peste moriréis en aquel lugar adonde deseáis refugiaros.»