Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Job 12, 4-14

4 La irrisión de su amigo, eso soy yo, cuando grito hacia Dios para
obtener repuesta. ¡Irrisión es el justo perfecto!

5 «¡Al infortunio, el desprecio! - opinan los dichosos -; ¡un golpe más
a quien vacila!»

6 Mientras viven en paz las tiendas de los salteadores, en plena
seguridad los que irritan a Dios, los que meten a Dios en su puño!

7 Pero interroga a las bestias, que te instruyan, a las aves del cielo, que
te informen.

8 Te instruirán los reptiles de la tierra, te enseñarán los peces del mar.
9 Pues entre todos ellos, ¿quién ignora que la mano de Dios ha hecho

esto?

10 El, que tiene en su mano el alma de todo ser viviente y el soplo de

toda carne de hombre.

11 ¿No es el oído el que aprecia los discursos, como el paladar
saborea los manjares?

12 ¿No está entre los ancianos el saber, en los muchos años la
inteligencia?

13 Pero con él sabiduría y poder, de él la inteligencia y el consejo.

14 Si él destruye, no se puede edificar; si a alguno encierra, no
se
puede abrir.