Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Job 3, 18-25

18 También están tranquilos los cautivos, sin oír más la voz del
capataz.

19 Chicos y grandes son allí lo mismo, y el esclavo se ve libre de su
dueño.

20 ¿Para qué dar la luz a un desdichado, la vida a los que tienen
amargada el alma,

21 a los que ansían la muerte que no llega y excavan en su búsqueda
más que por un tesoro,

22 a los que se alegran ante el túmulo y exultan cuando alcanzan la
tumba,

23 a un hombre que ve cerrado su camino, y a quien Dios tiene
cercado?

24 Como alimento viene mi suspiro, como el agua se derraman mis
lamentos.

25 Porque si de algo tengo miedo, me acaece, y me sucede lo que
temo.