Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Lucas 12, 14-23

14 El le respondió: «¡Hombre! ¿quién me ha constituido juez o
repartidor entre vosotros?»

15 Y les dijo: «Mirad y guardaos de toda codicia, porque, aun en la
abundancia, la vida de uno no está asegurada por sus bienes.»

16 Les dijo una parábola: «Los campos de cierto hombre rico dieron
mucho fruto;

17 y pensaba entre sí, diciendo: “¿Qué haré, pues no tengo donde
reunir mi cosecha?”

18 Y dijo: “Voy a hacer esto: Voy a demoler mis graneros, y edificaré
otros más grandes y reuniré allí todo mi trigo y mis bienes,

19 y diré a mi alma: Alma, tienes muchos bienes en reserva para
muchos años. Descansa, come, bebe, banquetea.”

20 Pero Dios le dijo: “¡Necio! Esta misma noche te reclamarán el
alma; las cosas que preparaste, ¿para quién serán?”

21 Así es el que atesora riquezas para sí, y no se enriquece en orden a
Dios.»

22 Dijo a sus discípulos: «Por eso os digo: No andéis preocupados por
vuestra vida, qué comeréis, ni por vuestro cuerpo, con qué os vestiréis:

23 porque la vida vale más que el alimento, y el cuerpo más que el
vestido;