Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Lucas 13, 3-14

3 No, os lo aseguro; y si no os convertís, todos pereceréis del mismo
modo.

4 O aquellos dieciocho sobre los que se desplomó la torre de Siloé
matándolos, ¿pensáis que eran más culpables que los demás hombres que
habitaban en Jerusalén?

5 No, os lo aseguro; y si no os convertís, todos pereceréis del mismo
modo.»

6 Les dijo esta parábola: «Un hombre tenía plantada una higuera en su
viña, y fue a buscar fruto en ella y no lo encontró.


7 Dijo entonces al viñador: “Ya hace tres años que vengo a buscar
fruto en esta higuera, y no lo encuentro; córtala; ¿para qué va a cansar la
tierra?”

8 Pero él le respondió: “Señor, déjala por este año todavía y mientras
tanto cavaré a su alrededor y echaré abono,

9 por si da fruto en adelante; y si no da, la cortas.”»
10 Estaba un sábado enseñando en una sinagoga,

11 y había una mujer a la que un espíritu tenía enferma hacía
dieciocho años; estaba encorvada, y no podía en modo alguno enderezarse.

12 Al verla Jesús, la llamó y le dijo: «Mujer, quedas libre de tu
enfermedad.»

13 Y le impuso las manos. Y al instante se enderezó, y glorificaba a

Dios.

14 Pero el jefe de la sinagoga, indignado de que Jesús hubiese hecho

una curación en sábado, decía a la gente: «Hay seis días en que se puede
trabajar; venid, pues, esos días a curaros, y no en día de sábado.»