Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Salmo 42, 1-5

1 (2) Como jadea la cierva, tras las corrientes de agua, así jadea mi
alma, en pos de ti, mi Dios.

2 (3) Tiene mi alma sed de Dios, del Dios vivo; ¿cuándo podré ir a
ver la faz de Dios?


3 (4) ¡Son mis lágrimas mi pan, de día y de noche, mientras me dicen
todo el día: ¿En dónde está tu Dios?

4 (5) Yo lo recuerdo, y derramo dentro de mí mi alma, cómo
marchaba a la Tienda admirable, a la Casa de Dios, entre los gritos de júbilo
y de loa, y el gentío festivo.

5 (6) ¿Por qué, alma mía, desfalleces y te agitas por mí? Espera en
Dios: aún le alabaré, ¡salvación de mi rostro y