Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

Salmo 46, 2-4

2 (3) Por eso no tememos si se altera la tierra, si los montes se
conmueven en el fondo de los mares,

3 (4) aunque sus aguas bramen y borboten, y los montes retiemblen a
su ímpetu. (¡Con nosotros Yahveh Sebaot, baluarte para nosotros, el Dios
de Jacob!) = Pausa. =

4 (5) ¡Un río! Sus brazos recrean la ciudad de Dios, santificando las
moradas del Altísimo.